Archivo del mes: septiembre 2018

Ikastolas navarras, en el Día Europeo de las Lenguas

Josu Reparaz Leiza

Josu Reparaz Leiza


Josu Reparaz Leiza. Desde hace ya 17 años, el 26 de septiembre venimos celebrando la efeméride del Día Europeo de las Lenguas por iniciativa del Parlamento Europeo y del Consejo de Europa. Sin embargo, sigue siendo necesario mantener el brillo y darle la importancia que la celebración posee: homenajear la diversidad lingüística de 800 millones de ciudadanos y ciudadanas de los 47 países europeos, con más de 200 lenguas propias, y en el que la UE posee 24 lenguas oficiales y unas 60 lenguas regionales o minoritarias, y en el que además se hablan muchos idiomas más procedentes de otras partes del mundo.

Numerosas instituciones europeas colaboran en un completo programa de actividades que se celebran en estas fechas a todo lo largo y ancho del continente;al que también la Federación de Ikastolas de Navarra quiere adherirse facilitando el encuentro, la valoración y el ejercicio de las lenguas europeas. Las ikastolas de Navarra llevan años inmersas en el gran reto del desarrollo de un multilingüismo equilibrado que apuesta por la revitalización del euskera como lengua propia minorizada, junto con la preparación para una sociedad cada vez más multilingüe y multicultural.

Toda lengua es, nada más y nada menos, que un sistema de comunicación verbal y escrito, de convenciones y reglas gramaticales empleado por las comunidades humanas evolucionadas. Es el poso de las culturas, un sedimento complementario y rico, pues todas aportan algo diferente que las hace imprescindibles. Las lenguas fluyen y evolucionan constantemente. Son la puerta que se abre para el buen entendimiento.

Las lenguas son elemento clave para la transmisión de los conocimientos científicos y tecnológicos y son el cauce en que se desarrolla toda la literatura, la poesía y el teatro. El escritor lesakarra Francisco Javier Irazoki, en su texto Bandada de tijerashace una interesante reflexión acerca de las lenguas:

“Fue a finales de los años 50 del s. XX. Mi hermana, en medio de un paisaje verde lloraba, mientras recorría un camino de tierra. Enseguida me describió las burlas padecidas en el colegio. Ella se expresaba en el euskera que nuestros padres nos enseñaron, y sus compañeros se reían. Para que yo no pasara por lo mismo me hizo aprender el castellano, y sentí que con cada nueva palabra recibía un escudo. Así, construí el muro detrás del cual Jorge Luis Borges, César Vallejo o Luis Cernuda me regalaron libertades. Entonces, la democracia trajo deseos justos de recuperar los idiomas apartados por el franquismo. Entre algunos supuestos protectores del euskera no faltaron las desmesuras. Su desafecto hacia otras lenguas era la prueba de la insinceridad con que defendían la propia;vi que usaban esa aventura para llenar el vacío íntimo. Al cumplir años he perdido convicciones. Una de ellas sigue conmigo y sé que va a acompañarme hasta los últimos días: quien ama un idioma, ama todos los idiomas”.

Esta celebración debiera impulsar, de una vez por todas, la despolitización de las cuestiones asociadas a las lenguas, esa lacra que hemos padecido entre nosotros. Se debe hacer lo posible para que cada individuo pueda elegir en libertad. Las lenguas jamás han determinado ideologías, ni menos visiones uniformes de arcadias felices o islas irreductibles. El mestizaje, a todos los niveles, es más que evidente, y no digamos hoy, en esta charca global… El uso de las lenguas obedece a múltiples condicionantes e intereses entre los usuarios: pragmáticos, afectivos, mercantiles, e incluso espirituales.

Conscientes de la conveniencia de que todos los ciudadanos y ciudadanas manejemos correctamente más de una lengua, de una forma equilibrada, las ikastolas de Navarra llevan años desarrollando la competencia comunicativa de su alumnado en varias lenguas, sin estrés ni sobreactuación. La inmersión en varias lenguas que señala el Proyecto Eleanitz desarrollado en estos centros (euskera-castellano-inglés-francés) es el reto que impone rigor en la consecución de las competencias que se deben alcanzar al finalizar la educación básica obligatoria. El alumnado ha de aprender a comunicarse, dentro del marco común que constituye el proyecto lingüístico de centro, en el aula, y fuera de ella, pudiendo desenvolverse en varias lenguas. Esto también contribuirá a lograr un futuro de convivencia y acabar con ciertas fronteras mentales de las sociedades, mejorando el entendimiento entre los países. “Quien ama una lengua, ama todas las lenguas”.

*El autor es director de la Federación Navarra de Ikastolas


 

Uxue. Unas «piedras sagradas» en el campo, que nadie ha catalogado todavía. Mitos y creencias venidas desde el paleolítico.

UJUE PEÑA LOS HUEVOS 4

UJUE PEÑA LOS HUEVOS 4


El pasado día 15 de septiembre del 2018 pudimos asistir en Uxue a una interesante jornada organizada por la Universidad Pública de Navarra.

Ahora toca mencionar la ponencia que en ese día dio el profesor de la UPNA Alfredo Asiain Ansorena, coordinador técnico del Archivo del Patrimonio Inmaterial de Navarra que a su vez es experto en cultura tradicional, oralidad y literatura de tradición oral. La charla llevaba el titulo de «El paisaje sagrado de Ujué-Uxue y sus leyendas»

Dentro de su disertación dijo que en muchas leyendas de antaño, sobre todo las que no se han escrito y solo nos llegan por tradición oral, siempre hay un algo de realidad que hay que descubrir pues ese poso nos puede llevar a encontrar antiguas creencias. El pasaje que más me impactó de toda su intervención es el que menciono a continuación.

Cuando las peñas hablan.

Hay leyendas en torno a peñas que nos descubren antiguos ritos… Peñascos que por tener ciertas formas naturales, o por estar tallados por el hombre de una determinada manera, nos recuerdan a altares o lugares de cultos y ritos antiquísimos.

El conferenciante nos habló de que en el occidente europeo existen numerosos lugares vinculados con mitos y rituales de carácter arcaico que configuran algo así como un “paisaje sagrado”.

El paisaje sagrado de las “sacra saxa”.

Sacra saxa son las palabras en latín cuyo significado es el de “peñas o piedras sagradas”. En esta clasificación entran todas las rocas que a través de los siglos han sido consideradas como poseedoras de un carácter mágico o sobrenatural por estar asociadas a diversas leyendas, ritos y creencias.

En esa categoría entran altares rupestres, santuarios y ermitas a los que protege una roca, abrigos y cuevas, conjuntos rocosos con formas peculiares…

El profesor proyectó  numerosas filminas que nos ayudaron a comprender lo que quería expresar. Y como el título de su charla era “El paisaje sagrado de Ujué-Uxue y sus leyendas” pasó a hablar de nuestro pueblo. De la roca donde se asienta… De los cultos a Júpiter y Lacubegi testimoniados en la piedra de sendas aras. Del oratorio romano encontrado en las excavaciones de la iglesia románica… De la devoción a Magna Mater, la diosa suprema de la fertilidad que ya mencioné en otro capítulo de este blog. Mencionó la leyenda de la paloma que cuenta el hallazgo de una imagen de la Virgen dentro de una peña…

Y yendo mucho más atrás en el tiempo, mencionó las peñas sagradas que él, al igual que otros expertos, también está estudiando… Peñas que por todo el Pirineo parecen estar  dedicadas a propiciar la fertilidad… que en la antigüedad era cosa de Diosas… por ser lo femenino sinónimo de fertilidad.
En Uxue tenemos el aljibe excavado en la roca al que se echan piedras pidiendo hijos…

En ese momento recordé que en nuestro pueblo, además de lo expuesto conocemos varias peñas que entrarían de lleno en la clasificación de ser algo sagrado, al igual que otros lugares del Pirineo que mencionó como ejemplo el profesor.

Uxue. Piedras que hacen intuir viejas creencias.

Al final de la intervención del profesor Asiain tomé la palabra e informé a los presentes que en Uxue conocemos nada menos que cuatro piedras relacionadas con lo legendario.
Cuatro posibles “sacra saxa” que de serlo van más allá, a tiempos más remotos que la Edad del Hierro y de la del Bronce…

Tras finalizar la sesión matinal de la jornada, Francisco Berrade Burgui y yo hablamos más distendidamente con el profesor.


Ahora, lo que comenté, o comentamos a Alfredo Asiain ilustrado por fotos y más argumentos

La piedra de las Brujas.

Lugar: En el camino de El Vedado. Entre el pinar de Muelas yun corral de propiedad municipal de reciente construcción sito donde estuvo la balsa de Santa Cruz. Dícese que ahí acudían las brujas a bailar…

El profesor Asiain nos aclaró que cuando se menciona la palabra “brujas” se puede entender que el lugar esté relacionado con ritos precristianos y que el nombre de brujas servía  para despreciar esos ritos y a quienes los practicaban.

Como la piedra era de grandes dimensiones y ocupaba toda la anchura del camino, fue destrozada por una excavadora y sacada, cachico a cacho, para poder hacer pasar la conducción del agua corriente del pueblo hasta el mencionado corral.

La cazoleta del Canal.

En el estudio de impacto ambiental de las obras de Canal de Navarra a su paso por tierras de Ujué ya se preveía que se iba a tener que mover una cazoleta, tipo de resto arqueológico no muy común en Navarra . Otra cazoleta que estaba en el trazado del canal está, o estaba, en Tudela.

En arqueología se denomina cazoleta al conjunto de hoyuelo u hoyuelos hechos en las rocas presuntamente para actos ceremoniales. Esos hoyos suelen ir acompañados de petroglifos, dibujos en la roca de muy diversas formas y tamaños. Podéis ver en Wikipedia una interesante definición de «cazoleta» y varias fotos que ilustran lo qué es.

Como el Canal de Navarra iba a pasar por el lugar donde estaba la cazoleta, en el informe se decía que la iban a cambiar de lugar. Ignoro si se hizo según lo planeado e ignoro el lugar a donde se trasladó.

La peña de los huevos.

La tradición oral que hemos oído los de Ujué sobre esta peña, o mejor dicho sobre esa piedra de arriba del todo, es que los de Gallipienzo quisieron hacerla caer a base de arrojarle huevos…

En la siguiente foto podemos comprobar que la parte superior de esta peña es bamboleante como otras que ya están catalogadas en Navarra.

El también uxuetarra Patxi Salaberri menciona esta peña en el libro donde se recoge la toponimia de, entre otros pueblos, Uxue y Gallipienzo.(Eslaba aldeko euskararen azterketa toponimiaren bidez . Bilbao: Euskaltzaindia, 1994.)

Leo en su página numero 445 que los de Gallipienzo le suelen llamar «la Peña de los Cojones». Tales palabras parecen ser una traducción literal de «los huevos» interpretados como genitales…

Aunque, vete a saber (digo yo) si tiene otra connotación relacionada con algún rito propiciatorio relacionado con la fertilidad reproductiva (por ejemplo el rito o acción que les atribuimos en la leyenda que contamos los de Ujué)

Ahora fijémonos en donde está la dicha Peña de Los Huevos de entre Uxue y Gallipienzo. En el mapa vemos claramente la situación de esta peña. Justo en un punto de la muga o limite de los términos municipales de Gallipienzo y Uxue

Ya en término de Uxue vemos un paraje denominado El Rincón de La Comuna. Un poco más abajo y más allá del margen inferior derecho de este mapa, hay un paraje llamado «Barranquilla de los Ladrones» con rocas horadadas como si fuesen cuevas. La tradición oral de Uxue dice que en dichas cuevas se ocultaban los ladrones… Habría que investigar allí también para certificar si aquellas rocas son “sacra saxa”.

Las peñas que descubrió Fernando Jurío Burgui.

Hace tres años, nuestro paisano Fernando Jurío, cuando paseaba por términos de La Sierra de Uxue y a unos cuantos centenares de metros de la ermita de La Blanca, vio unas rocas que en ese momento, tras un incendio, estaban libres de los matojos que anteriormente las tuvo ocultas. Fernando quedó sorprendido por las huellas y huecos que tales rocas presentan.

Según Jurío, debajo, a poca distancia de estas rocas, hay otra mucho más grande, pero de peor acceso, que también le dejó sorprendido. Yo pasé dichas fotos a Humberto Bustince para que las hiciese llegar a algún profesor de la UPNA que dominase el tema y le interesase. Ahora, y tras su charla en Uxue, se las envié a Alfredo Asiain que me contestó que tienen todas las pintas de ser «rocas sagradas»…

Leo en Internet que las hipótesis existentes sobre lo qué significan los agujeros que aparecen en este tipo de piedras son muchas, entre ellas pongo estas: colectores para ofrendas, receptáculos de libaciones o de sacrificios, símbolos de carácter sexual femenino, cartografías, de constelaciones celestes y caminos terrestres, marcadores de espacios sagrados, de caminos migratorios, de lugares con alto valor mágico y propiciatorio, ligadas a cultos destinados a promover o a incrementar la fertilidad, particularmente la femenina, tableros para juegos, marcadores de operaciones pre-numéricas etc. etc.

Por otra parte, Francisco Berrade, gran andarín que conoce todo el término de Uxue, me dice que ha visto en otros parajes rocas como las que encontró Jurío…

Ojalá que esto sirva para hacer una búsqueda por todo nuestro término municipal y, al menos, para hacer un estudio de las presuntas»rocas sagradas» que conocemos. Ello nos acercaría al pensamiento de nuestros antepasados de por lo menos hace seis mil, ocho mil años o quizás al pensamiento de los del paleolítico.

Mikel Burgi