Navarra recupera 26 años después el homenaje popular a sus reyes
El Gobierno de Navarra homenajeó ayer a los reyes y reinas de Navarra, como cada año desde hace cuatro décadas, ante el mausoleo que contiene los restos de los primeros monarcas. El acto, que recuperó el formato popular que tenía hasta 1990 y tuvo carácter civil, comenzó con una misa en la iglesia de San Salvador de Leyre.
Al compás del himno de Navarra, interpretado por trompetas y tambores, la comitiva gubernamental salió de la ceremonia conventual hacia el Panteón Real del Monasterio de Leyre. El séquito lo encabezaban los diferentes miembros del Ejecutivo navarro, acompañados de maceros vestidos con el atuendo típico de tiempos del Viejo Reyno, y lo cerraban la presidenta del Parlamento, Ainhoa Aznárez, el vicepresidente del Gobierno, Manu Ayerdi, y la presidenta de Navarra, Uxue Barkos. Ellos mismos fueron quienes posteriormente realizaron la ofrenda colocando ante el panteón una corona con la leyenda Navarra a sus Reyes y Reinas, en euskera y castellano, una urna con el donativo del Gobierno para el monasterio por su custodia y un libro representativo de la producción legislativa de las Cortes y del Parlamento de Navarra. Todo ello en un homenaje que, por decisión del Gobierno de Navarra, no contó con la presencia de los reyes españoles, Felipe VI de Borbón y Letizia Ortiz, en reconocimiento de la soberanía de lo que fue el Reino de Navarra, y tampoco se hizo coincidir con la entrega del Premio Príncipe de Viana de la Cultura como se venía haciendo los últimos años. De la misma manera, tampoco se interpretó el himno de España.
Tras el paso de los miembros del Gobierno, decenas de personas aprovecharon para entrar en la capilla y poder presenciar la ofrenda, algunos en su primera ocasión, y otros tras muchos años. Una vez allí tuvo lugar el homenaje, amenizado por el himno de Navarra y el Agur jaunak interpretados por la Coral Nora de Sangüesa, que contó con la asistencia de representantes de todos los partidos políticos a excepción de Izquierda-Ezkerra.
Una vez finalizada la ceremonia, tuvo lugar la actuación de dantzaris de Oberena, grupo que cumple su 75º aniversario, quienes interpretaron diferentes bailes tradicionales como la Zinta-dantza o el paloteado de Cortes. Al término de las danzas y como clausura, los allí presentes pudieron disfrutar de un lunch popular junto a los representantes institucionales.
En breve
Ausencia de Izquierda-Ezkerra. Los representantes políticos de la coalición fueron los únicos que no acudieron a homenajear y recordar a los reyes y reinas navarras.
Javier Esparza presente. Quien sí que estuvo en la ceremonia fue el presidente de UPN, José Javier Esparza, a diferencia de la celebración de los Premios Príncipe de Viana a los que no acudió por no ser invitados los reyes de España.
‘Agur jaunak’ y el himno de Navarra. Fue la música que acompañó el acto de homenaje a los monarcas del Reino de Navarra.
75º aniversario de Oberena. El grupo de danzas de Oberena fue el encargado de poner fin a la ceremonia de ayer. Los dantzaris en el año de su 75º aniversario, interpretaron diferentes bailes tradicionales.
DESDE 1973
En 1973, se estableció la costumbre de que los representantes institucionales de Navarra acudieran anualmente al monasterio de San Salvador de Leire para tributar, con su asistencia a una misa de funeral, un homenaje a los Reyes y Reinas del antiguo Reino de Navarra, depositando, ante el mausoleo de los primeros monarcas del Reino de Pamplona, una corona de flores y entregando al monasterio un donativo en agradecimiento a la custodia que de los restos reales realiza la comunidad benedictina.
Esta fiesta, ha resaltado el Ejecutivo foral, nació con un marcado acento ciudadano, ya que junto a la representación institucional acudían varios cientos de personas.
En 1982, la Diputación Foral decidió establecer la celebración del Día de Navarra, asociándolo a esta celebración. Así se celebró en los dos años siguientes, hasta que en 1985 el Día de Navarra quedó establecido por Ley foral en el 3 de diciembre, aniversario de la muerte y festividad de san Francisco Javier.
En 1990, con motivo del 50 aniversario de la Institución Príncipe de Viana, órgano cultural del autogobierno de Navarra, se creó el Premio Príncipe de Viana de la Cultura, que se concede anualmente por el Gobierno a propuesta del Consejo Navarro de Cultura, y se decidió que su entrega se realizara en el monasterio de San Salvador de Leyre, coincidiendo con el Homenaje a los Reyes de Navarra. Entre 1993 y 2015, el Príncipe de Asturias y de Viana ha entregado el premio y ha presidido el Homenaje a los Reyes.
Diario de Noticias, 4 de Julio de 2016