Estamos en vísperas de un nuevo 3 de diciembre. Día del Euskara (barkatuko didazue euskaraz ez idazteagatik…), anterior al denominado Día de Navarra. Y desde Orreaga Fundazioa tenemos todo preparado para intentar, una vez más, que esta fiesta sea menos institucional y se note en la calle.

Y este año hemos querido querido recordar la Gamazada. Un hecho histórico fundamental en la historia reciente de este país ocurrido hace 130 años. En esa ocasión, toda Navarra y toda Euskal Herria en su conjunto, sin partidismos, se movilizó frente al centralismo del Estado español para impedir que se le hurtara lo poco que en 1841 le habían dejado de su Fuero.

Este movimiento popular, en el cual confluyeron todas las ideologías, que tuvo lugar durante 1893 y 1894, iniciándose en Navarra y que fue secundado por el resto del sur pueblo vasco, Provincias Vascongadas entonces, donde se le dio el nombre de Sanrokada. También los vascos de la diáspora tuvieron su protagonismo.

Las manifestaciones multitudinarias se dieron en cantidad de localidades, y, por ejemplo, en la del 14 de marzo en Estella se reclamaba: “…Si el pacto de 1841 se había roto, había que retomar 1512 recuperando la total independencia económica, judicial y legislativa”.

Lo mismo las manifestaciones musicales en conciertos, festejos, plazas de toros… donde siempre se entonó el Gernikako Arbola, como símbolo cantado de las libertades vascas, además de otros sones de la tierra. Las Coplas Monteagudo son un ejemplo muy claro del ambiente que se respiraba en aquellos días “…pues si el Gobierno de España sigue en sus pretensiones, se tomarán en Navarra serias determinaciones… formemos una guerrilla para salir adelante…”.

La recogida de firmas fue una medida de presión, y 120.000 navarros lo hicieron, como figura en el Libro de Honor de los Navarros, que se llevó para que lo tuviesen en cuenta en el gobierno de Madrid, etcétera.

También tuvimos ración de represión (esa no podía faltar) la cual fue brutal en las Provincias Vascongadas con más de 6 víctimas mortales y decenas de heridos.

Tal fue la respuesta del pueblo vasco al proyecto de ley del ministro Gamazo que, temiendo un nuevo levantamiento popular similar a las pasadas guerras carlistas, el Estado concentró tropas en Vitoria, Logroño, Burgos y Zaragoza. El proyecto de ley fue retirado y lo que nos quedaba de Fueros se mantuvieron como estaban. Hasta la siguiente tacada centralista.

La Estatua de los Fueros, como el resto de los pocos que se levantan en nuestra comunidad que no recuerden a los conquistadores, tuvo que ser levantado por cuestación popular. Y fue una expresión artística de los sentimientos de libertad que sintieron nuestros bisabuelos, expresada también por una serie de textos de los que reproduzco un par de ellos:

“Nosotros los vascos, que no tenemos otro señor que el de lo alto; acogemos de corazón al forastero, pero no soportamos su yugo. Oidlo bien, nuestros hijos”.

“Gu euskaldunok beste jaun eztegu jaungoikoa baizik atzekoari ostatua ematen degu onirizkero baino eztegu nai aien uztarria jasan. Aditu ezazue ondo gure semeak“.

“Nosotros los vascos de hoy, en recuerdo inmortal de nuestros antepasado nos hemos reunido aquí para manifestar que queremos guardar nuestras leyes.”

“Gu gaurko euskaldunok gure aitsoen illezkorren oroipen oroipenean bildu gera emen gure legea gorde nai degula erakusteko”.

El resto de las inscripciones os invito, a quien no lo haya hecho, se dé una vuelta y las lea.

Y también quiero recordar, también, a la persona que sirvió de modelo a la matrona que culmina esta monumental columna, Rosa Oteiza Armona, la mujer que sirvió de modelo y que tan caro pagó su atrevimiento de ser trabajadora y madre soltera, en una sociedad tan conservadora como la navarra del siglo XIX.

Y volviendo a la Gamazada, que su conmemoración una vez más ha pasado desapercibida y olvidada por las que dicen ser representantes de todos los navarros.

¡Qué cómodos se sienten algunos con su “foralidad” de salón…! ¡con su navarridad de boquilla!

Y este año con el agravante de que se presentó al Parlamento de Navarra, por parte de un grupo formado para su conmemoración por diversos colectivos y personas, Gamazada 130 urte/años, un programa para el cual se contaba con la participación conjunta del Orfeón Pamplonés y el Orfeón Donostiarra. Se propuso también la exhibición, en el atrio del edificio, de la exposición que ha recorrido diversas localidades de Nafarroa, en la que, bajo la visión de cuatro artistas, se hace un repaso histórico a aquellos acontecimientos,

por medio de imágenes y textos. La llamada Mesa del Parlamento, en la cual tienen mayoría los partidos centralistas UPN Y PSOE, rechazó la propuesta de la exposición alegando “que su contenido no respeta la cortesía parlamentaria y contiene imágenes y grafismos ofensivos al decoro de la cámara, de sus miembros y de las instituciones”. En una palabra, censura.

Y como decía la Plataforma Gamazada 130 urte/años al Parlamento en respuesta a su negativa: “La ocultación de la realidad histórica es propia de personas acostumbradas a imponer su criterio haciendo uso de autoritarismo con carga manipuladora, rasgos antidemocráticos que evocan tiempos dictatoriales, aplicación de censura a todo lo que no responde a su propiaperspectiva.

La Historia del pueblo vascón, sus leyes, idioma, en definitiva, su cultura tan considerada fuera de las fronteras del Estado español y tan denostada dentro de ellas, es víctima de la desidia y desprecio en nuestra propia tierra por parte de ciertos ultra nacionalismos empeñados en imponer otra cultura, contribuyendo al genocidio cultural que tras cientos de años se viene ejerciendo contra la cultura vasca”.

Nos vemos a las 12 en la plaza del Ayuntamiento.

Koldo amatria. Orreaga Fundazioaren Lehendakaria