En plenos sanfermines, tenemos el mismo día y a la misma hora dos iniciativas coincidentes dirigidas a los kantuzales

Koldo Amatria

Sanferminetan_kantari


 

Las dos actividades tienen como eje común la canción popular vasca. Una de ellas, “Sanferminetan kantari 2022”, organizada por ORREAGA FUNDAZIOA, lleva varios años saliendo a las calles de Iruñea.

Esta fecha, tradicionalmente el primer sábado de fiestas, salvo que coincidan con el día 6 o 7, ha sido considerada como una oportunidad de juntar a cientos de personas, por no hablar de un par o tres de miles, para cantar canciones populares vascas, dentro de un ambiente sanferminero, en ocasiones tan alejado de nuestras raíces, y como culminación de un ciclo de diferentes “kantuz” a lo largo y ancho de Iruñea y de Euskal Herria en general, durante el curso ya finalizado. Y que por otra parte es como el inicio, también, de los ciclos de “kantuz” por las distintas localidades en fiestas de verano.

Esa “kantujira” culmina en una comida popular en la Plaza de San José. En la calle, como deben de ser las celebraciones festivas en unas fechas como los sanfermines. Que se nos vea. Y se nos oiga.

Con un precio del cubierto lo más asequible posible, (este año 30 euros, precio en el que se incluye un boleto para participar en una reproducción del monumento a la Batalla de Orreaga, valorada en 2.500 €, a colocar en Luzaide-Valcarlos) a fin de hacerlo accesible al mayor número posible de personas interesadas en pasar un buen rato, en buena compañía, con un buen menú, y unas gargantas dispuestas a cantar todo lo cantable.

La otra actividad es el “San Fermin Kantu Zaharren Bazkaria”, organizado por Angel Mariezkurrena y con el fin, según reza en su publicidad de ser “una cita en la que disfrutar de una comida y participar en la sobremesa cantando”.

No participa del ambiente callejero y se limita a juntar a un par de cientos de personas alrededor de la mesa. Es un “kantuz bazkaria” que lo mismo se podría celebrar en cualquier otra fecha del año, pues el único ambiente “sanferminero” es el que le da la vestimenta de sus asistentes (el “oficial” blanco y rojo). El precio, en el que se incluye un cancionero popular, está este año en 65€ por comensal, precio a todas luces lejos de lo que se pueda considerar “herrikoia-popular”, casi se podría calificar de “elitista”.

Dos conceptos de fiesta totalmente distintos, estando situados en las antípodas el uno del otro, a pesar de esas bases que fundamentan a ambos: la canción popular vasca y la buena mesa. El uno, “Sanferminetan kantari”, busca, en todo momento, la calle, el caos festivo en esos días centrales de los sanfermines. Una estructura sencilla: un director y una docena de músicos, y cientos de personas dispuestas a dar lo mejor de sí en la interpretación de la música popular. Y al final, a la sombra de los hermosos árboles que refrescan la plaza de san José, disfrutar de una buena comida, una buena compañía y por supuesto unas buenas canciones. Y cómo no, unas buenas dantzas populares.

El otro concepto huye de la calle y se refugia alrededor de una buena mesa, se supone, y con una estructura de participación en la que la espontaneidad no existe. En la que, por lo que se ha podido ver en tv, no se deja nada al azar. Está todo estructurado y medido.

Dos conceptos o dos modelos de fiesta que, según parece, están condenados a convivir. ¿Soncompatibles? ¿Resta participación el uno al otro y el otro al uno? ¿No sería más interesante el
acuerdo y hacerlos en días diferentes?

El debate está servido.

Koldo Amatria (Miembro de Orreaga Fundazioa)