Agenda / Ekimenak

Homenaje en Güesa a Camino Oscoz, maestra asesinada por los franquistas en 1936 en Urbasa

Camino Oscoz

Camino Oscoz


El sábado 11 de agosto se rendirá un homenaje póstumo a la maestra republicana Camino Oscoz, que fue detenida, rapada, violada varias veces, torturada, paseada sucia y con las ropas rotas por las calles de Pamplona, y finalmente tiroteada y arrojada al vacío desde el balcón de Pilatos. Sus restos aún no han sido encontradas. El homenaje será en la localidad salacenca de Güesa-Gorza, en la que estuvo de maestra.


Camino nació en la calle Santo Domingo de Pamplona en 1910. Hija de Antonio y Anastasia, era la menor de 4 hermanos, pronto se quedó huérfana de ambos padres debido a la gripe de 1918. Los hermanos fueron separados y criados por diferentes familiares, ella fue a vivir con su tía. Camino pronto destacó como buena estudiante en las Teresianas de Pamplona donde terminó sus estudios con magnificas notas. En 1930 ejercía de maestra en el pueblo de Güesa, en el Valle de Salazar.

Su vida fue corta en tiempo, pero muy amplia en su lucha. Camino pertenecía a esa corriente arrolladora, incansable, luchadora, esperanzadora que supuso la educación durante la II República, esa corriente que representaban en particular las maestras que encarnaban los ideales republicanos, la lucha por la igualdad, la educación pública, la transmisión del conocimiento. La postura de la República a este respecto quedó muy clara. La situación de estas maestras no era fácil, tenían que trasladarse de un lugar a otro, tenían que ser valientes y decididas, y Camino lo demostró con creces desde el principio, su vocación venía desde la cuna. Camino le insistía al alcalde de Güesa la necesidad de cambiar el material escolar obsoleto por uno más moderno. En Pamplona Camino participó en la Semana Pedagógica del 4 al 11 de septiembre de 1932, un gran hito para la época.

Camino se asoció al Socorro Rojo Internacional tras la Revolución de Asturias de 1934, ya que muchos de los detenidos encarcelados en el Fuerte San Cristóbal vivían en condiciones infrahumanas. Aquellas mujeres venían desde Pamplona, a veces en las peores condiciones meteorológicas, llevando comida y regalos, acompañándolos con sus dulces caras y voces. Pero Camino era muy mal vista en Pamplona, era de izquierdas, solidaria, conocida activista, secretaria del Partido Comunista, afiliada a FETE-UGT, multimilitante comprometida con su trabajo, vivía rodeada de demasiadas miradas acusadoras en una ciudad hostil.

En Navarra no hubo guerra. De la noche a la mañana todo cambió. Los que una vez fueron compañeros de tascas se convirtieron de repente en verdugos sedientos de sed y venganza. Miles de personas llenas de Dios y Patria celebraban la fiesta de la sangre que aparecía en cada esquina, en la Vuelta del Castillo, una fiesta de tiros, misas y aperitivo, tiros que se oían sin parar pero a los que nadie les daba importancia. Mujeres y hombres, represaliados, golpeados, asesinados, a ellas ricino y rapado, vejaciones y humillaciones, y el asesinato. La Pamplona del terror, la Navarra de Dios.

A Camino la detuvieron el 31 de julio y la encerraron en la cárcel de Pamplona. Su compañero Tomás Ariz, conocido líder del PC de Pamplona, ya había sido fusilado antes. Camino era una “presa fácil”, rodeada de niñatos bravucones con ganas de demostrar gallardía en retaguardia. Los falangistas, entre ellos el cruel “toico” le administraron grandes dosis de aceite de ricino. Le raparon pelo y cejas, la maltrataron, violaron repetidamente, y la burlaron durante horas. Pero el escarmiento iba más lejos, había que humillar, apalear, herir, ridiculizar, la pasearon por las calles de Pamplona, sucia, su vestido rasgado. Días después la transportaron hacia Urbasa, y en medio de la carretera los carlistas la tirotearon y arrojaron por el balcón de Pilatos. Cayó cientos de metros hasta el término municipal de Baquedano, donde su cuerpo todavía no ha sido encontrado. Tenía 26 años.

En su libro La Guerra Civil en la Frontera, Pío Baroja habla de Camino: “Al volver, he sabido muchas cosas de las que no quisiera haberme enterado. Entre ellas el caso de la maestra de un pueblo del Roncal, llamado Güesa, una muchachita de Pamplona, inteligente, que se había hecho comunista. Se llamaba María del Carmen Oscoz, y yo supe de su existencia, porque en el comienzo del año 1936 me empezó a escribir unas cartas en las que se mostraba anticlerical y entusiasta del comunismo, cartas de persona inteligente. Esta pobre muchacha leía mis libros, creía que yo estaba equivocado al no identificarme con el entusiasmo comunista. La maestra era audaz y valiente. En el pueblo parece ser que había un cura que la perseguía. Ella pintaba a su perseguidor como a un monstruo. La maestrita fue a varias reuniones, y al comenzar la revolución la detuvieron y la llevaron a la cárcel de Pamplona. Algunos días después la sacaron en un camión, y en medio de la carretera la mataron los carlistas, tirándola al suelo y disparando sobre ella varios tiros. Después arrojaron su cadáver por un barranco. ¡Qué crueldad más baja!.”

En octubre de 2013 a instancias del historiador y nieto de asesinado Balbino García de Albizu y con la colaboración de la Sociedad Aranzadi , se hicieron las primeras prospecciones. “..Nunca se ha encontrado su cuerpo. ¿Tal vez ahora? Entre los objetos encontrados en la sima: un lápiz, un txiskero, una granada de mano, y restos de un uniforme militar… El lápiz, ese lápiz. “ ¿Habían abierto la sima…? Sí, en 1978, cuando rescataron los restos del maestro Balbino Bados, alguien cubrió la boca con una gruesa capa de cemento, alguien que sabía lo que había dentro y no quería que fuera encontrado, alguien de los del “mejor no remover”. En esa fecha vivían todavía muchos de los autores, cómplices y encubridores de los crímenes, las delaciones, las denuncias, muy significativo.


21 de julio: acto de la Memoria en Buñuel

Buñuel 2017

Buñuel 2017


Este año de 2018 por causa del calendario vamos hacer el acto de MEMORIA en BUÑUEL el día 21 de JULIO. Será a las siete y media de la tarde en la placeta del AYUNTAMIENTO y pensamos poner sillas. Haremos un relato de lo que sucedió los días 18, 19 y 20 de Julio.

Contaremos de quienes dieron forma al glorioso movimiento nacional salvador de España y cómo tomaron el poder de la Villa el día 21 y a continuación ya llenaron el Ayuntamiento de hombres prisioneros.

En esos días se construyó la complicidad y el silencio que ha permitido a tardanza de la verdad.

Será un acto en el que quedará plasmada la verdad y el recuerdo de los inocentes.

Agradeceremos de vuestra presencia

Buñuel verano de 1936

Pedro José Francés.


El 21 de Julio de 1936

Ese día de aquel mes era martes. En casi todos los lugares de por aquí cerca sucedió algo parecido a lo que vamos a relatar. Unos hechos que pasados ochenta y dos años nadie recuerda ni nadie reconoce.

Ese día el Glorioso movimiento nacional ya estaba implantado. El día domingo se habían reunido las fuerzas de derechas en sabe dios qué lugar, y habían decidido poner en práctica los diez puntos que componían el bando de Mola, y seguir con las instrucciones interiores: “serán pasados por las armas cuantos se opongan al Movimiento salvador de España fueren los que fueren los medios empleados…”

Círculos carlistas, miembros de la CEDA, Sociedades de agricultores, Asociaciones católicas de padres de familia, Agrupaciones de mujeres católicas, Juventudes populares agrarias y fuerista, Sociedades de jóvenes católicos, y los incipientes miembros de Falange Española… cada uno de estos grupos ponen a algunos de sus hombres a dirigir el Alzamiento, y en el momento de la verdad, con sus familias y servidumbre, habrá hombres dispuestos a apretar el gatillo contra otros hombres y mujeres para rapar a otras mujeres y purgarlas con ricino.

El día lunes, los hombres de la derecha habían tomado el control de los ayuntamientos de la mano benemérita de la guardia civil. Los hombres más honorables se habían impuesto como agentes de la autoridad y ya podían cumplir órdenes que emanaban del manado. Ya tenían a los más significados hombres de izquierdas encerrados en las dependencias municipales y ya podía empezar a matar gente sin piedad.El día 21 de Julio de 1936 nos encontramos con todas la pruebas de que no sucedió un Golpe de estado en el que los generales toman unos pocos centro de poder sino que en realidad fue un golpe de la población contra la población. Así pensaron lo generales que había de ser el Glorioso movimiento: así lo hacían en tierras africanas ir a por la gente sin miramiento y buscar el crimen y la muerte para ganar honores.

A partir de este infausto día se cimenta una red de connivencia ente la canalla, una complicidad lejos de los militares y es la población la que se protegerá unas a otros y entre todos se servirán de coartada para que de aquellos hechos aunque no se olviden, jamás se pueda hablar.